La Lectura en México Disminuye un 14% en 9 Años, Revela Inegi
En un informe reciente publicado por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), se ha revelado una preocupante disminución en los índices de lectura entre la población mexicana.
Según los datos recopilados, la tasa de lectura ha descendido en un 14% en un lapso de 9 años, situando el porcentaje de personas que leen algún tipo de material, ya sea libros o páginas en internet, en tan solo un 69.6%.
Este dato refleja una tendencia alarmante en el hábito de la lectura en México, lo que plantea interrogantes sobre las posibles causas detrás de esta disminución y las implicaciones que podría tener para la sociedad en general.
Entre las posibles razones se especulan factores como el avance tecnológico, el aumento del uso de dispositivos electrónicos y la creciente oferta de entretenimiento digital.
En un análisis reciente sobre los hábitos de lectura en México, se ha observado un leve aumento del 1.1% respecto al año anterior, según datos del registro histórico.
Sin embargo, este incremento no oculta la tendencia a la baja que ha persistido desde 2015.
El indicador ha mostrado una disminución constante desde 2015, cuando se registró un 74.8% de lectores en la población, hasta alcanzar un mínimo histórico de 68.5% en 2023.
Este año, el porcentaje ha mostrado una ligera mejoría, pero los desafíos persisten.
Al analizar el decremento por grupos de edad, se destaca que la población de 45 a 54 años ha experimentado el mayor descenso, con una contracción de 20.1 puntos porcentuales desde 2015. En contraste, el grupo de 18 a 24 años presenta el menor descenso, con una disminución de 6.5%.
Es notable que entre los jóvenes de 18 a 24 años, ocho de cada 10 personas practican la lectura, mientras que entre los mayores de 65 años, esta cifra disminuye a 5 de cada 10.
Además, entre los adultos de 45 a 54 años, solo 6 de cada 10 ciudadanos realizan esta actividad.
Los datos también revelan que solo el 7.8% de la población acude a bibliotecas, mientras que un 13.8% asiste a librerías y un 8.7% a puestos de libros o revistas usados.
Estas cifras reflejan los bajos niveles de participación en actividades relacionadas con la lectura.
Una de las posibles causas de estos bajos niveles de participación podría ser la falta de estímulos durante la infancia, ya que gran parte de las personas que no leen afirman que no tuvieron acceso a libros diferentes a los de texto en su hogar.
Solo 4 de cada 10 personas reportaron haber tenido libros variados disponibles en su casa durante su infancia.
A pesar de este leve repunte, queda claro que fomentar la lectura desde edades tempranas y promover el acceso a libros y espacios de lectura siguen siendo desafíos importantes para mejorar los hábitos de lectura en México.
Expertos en educación y cultura han expresado su preocupación ante esta tendencia, resaltando la importancia de fomentar la lectura desde edades tempranas y promover políticas públicas que incentiven el acceso a la literatura y el desarrollo de habilidades de comprensión lectora.
El descenso en los niveles de lectura no solo afecta el enriquecimiento cultural y cognitivo de la población, sino que también podría tener repercusiones en ámbitos como la educación, el empleo y el desarrollo personal.
Es fundamental abordar este problema de manera integral, involucrando a diversos actores sociales y gubernamentales para revertir esta tendencia y fomentar una cultura de lectura en México.
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